Hamacas que se mueven solas


En la plaza Manuel Belgrano de la ciudad de Firmat, provincia de Santa Fé, desde 2007, existe una estructura de la que penden tres hamacas para niños que se balancean solas, una de ellas en forma permanente, sin que nadie las haya impulsado y aunque no haya viento.
Un video de You Tube muestra cómo la hamaca comienza nuevamente a moverse agitadamente, en forma sorprendente, segundos después de que un hombre en cámara, en la misma grabación, la detiene.
Parece que este no es el único caso en Argentina, porque el mismo suceso extraño ocurrió en la Escuela Hogar de Paraná, Entre Ríos, en el “parquecito”.
Fueron testigos de este segundo hecho el sereno del lugar, cuyo nombre es Hugo, el sereno de la pileta, Nelson, un policía que custodia la torre y otros efectivos comprobaron el fenómeno.
En este caso sólo se movía una sola hamaca, la que ocupa el lugar del centro entre otras dos, las cuales permanecían detenidas mientras éstas se balanceaba con fuerza.
También fueron vanos los esfuerzos por detenerla porque volvía a balancearse nuevamente con singular dinamismo.
Un equipo de catorce personas llegó de Estados Unidos en el mes de abril de este año a la Argentina para estudiar este fenómeno ya que es el único lugar en el mundo donde se registra este extraño hecho.
Expertos sostienen la hipótesis de que se trataría del impulso ejercido por fuerzas electromagnéticas que actúan sobre los materiales de que están hechas las hamacas, lo que generaría el balanceo; o bien que podrían ser otros fenómenos físicos que aún desconocemos.
Es un caso que debería ser estudiado con detenimiento porque de tratarse de una fuerza natural desconocida capaz de mover una hamaca, tal vez podríamos estar en presencia de una nueva fuente de energía que se podría aprovechar con fines más útiles.
Este tema puede producir una gran cantidad de conjeturas y hasta atribuirse a causas sobrenaturales o mágicas.
Sin embargo tenemos que pensar que si un hombre primitivo nos viera encender la luz de una habitación, pensaría que se trata de algo mágico; y lo mismo si tuviera la oportunidad de televisión si nunca la ha visto; podría creer que lo que se proyecta en la pantalla está dentro del aparato; y si escuchara una voz por teléfono creería que hay alguien pequeño oculto en el tubo. La falta de conocimiento nos hace imaginar cosas sin ningún fundamento serio y cuando se descubre la fuente nos damos cuenta que todo ha sido producto de nuestra mente.