La Inteligencia



La inteligencia no es lo que uno piensa, es poder responder creativamente en el momento presente.

El intelecto no es inteligencia porque el intelecto es el conjunto de conocimientos adquiridos y la inteligencia no tiene que ver con los conocimiento sino que actúa en el ahora en forma impredecible y no de acuerdo a la experiencia pasada.

Hay un cuento que puede esclarecer lo que significa ser inteligente:

Tres amigos, uno católico, otro protestante y otro judío, se encuentran con otro amigo común, quien les cuenta consternado, que su médico le acaba de dar seis meses de vida.

El hombre preocupado, le pregunta al católico qué haría él si tuviera sólo seis meses de vida y el católico le contesta que se dedicaría a rezar, a ir a la Iglesia y donaría todos sus bienes.

Luego le pregunta lo mismo al protestante, quien le dico que él vendería todas sus pertenencias y se iría de viaje a pasarla lo mejor posible y a conocer el mundo.

Finalmente le hace la misma pregunta al judío; y éste le responde que él iría a ver a otro médico. ¡Eso es inteligencia!

La inteligencia es un don natural, la vida y la naturaleza son inteligentes, pero el hombre parece haber perdido su inteligencia; sin embargo con la meditación puede recuperarla.

La inteligencia puede ser un peligro para las instituciones porque la inteligencia es libre y no se puede adaptar a ninguna estructura; pero es suficiente para resolver todos los problemas y es generosa y audaz por naturaleza.

Una persona inteligente acepta sus limitaciones y no es perfeccionista; se da cuenta que no existe nada seguro y no tiene miedo.

Los niños nacen inteligentes pero a medida que crecen todos los que lo rodean se encargan de anular su inteligencia y así ese niño aprende a tener miedo y a reaccionar como todos, condicionado por sus conocimientos previos.

Hay un cuento que puede servir de ejemplo:

Una mujer intentaba sin éxito abrir una lata, como sus esfuerzos resultaban inútiles, decidió consultar en un libro de cocina. Pero antes de encontrar la fórmula para abrir las latas en el libro, se dio cuenta que su cocinera ya la había abierto.

Con curiosidad le preguntó cómo lo había hecho y ella le respondió: Señora, cuando uno no sabe leer tiene que usar la inteligencia.

Con el tiempo nadie usará su inteligencia porque la gente tendrá todas las respuestas con sólo hacer click en el teclado de su ordenador, pero cada día se sentirá más aburrida, más ansiosa y más inútil.

La educación actual no permite pensar por sí mismo sino que obliga a memorizar lo que pensaron otros. Este tipo de educación es la que anula la inteligencia.

Tal vez alguna vez, la educación ayudará a los seres humanos a usar su inteligencia, a ser más creativos e inventivos, a encontrarse a sí mismos y entonces nunca nadie los podrá obligar a hacer otra cosa.

Hoy en día la mayoría está haciendo el trabajo de otro, de modo que es comprensible que se comporten con tan poca inteligencia. Son sólo imitadores, porque les resulta imposible ser ellos mismos y es por eso que están siempre descontentos.

Malena
Fuente: “Inteligencia. La respuesta creativa al ahora”; Osho.