Sobre las experiencias cercanas a la muerte



Existe mucha bibliografía  y también gran cantidad de artículos publicados, debidamente documentados sobre este tema, que intentan descubrir la verdad sobre el intrincado misterio de la conciencia.

El famoso neurocirujano argentino Raúl Matera (1915-1994), reveló en cierta oportunidad que le parecía sorprendente lo que experimentaban  algunos de sus pacientes durante el estado de coma o bien mientras estaban completamente anestesiados.

Lo que más llamaba su atención, era que esas experiencias eran similares en todos los casos, aún tratándose de personas muy diferentes.

Existe un caso que por su trascendencia se hizo famoso a través de una película documental.  La experiencia vivida por Pam Raynolds, testimonio que resulta muy valioso,  por haber sido monitoreado  en condiciones rigurosas en una sala de cirugía.

Sabemos que existen casos de personas que sobrevivieron después de haber sufrido un coma profundo, incluso después de haber estado un tiempo sin respirar y sin aparente actividad cerebral. Algunos de ellos, al despertar, reportaron haber escuchado y visto todo lo que pasaba a su alrededor y al mismo tiempo haber experimentado una sensación de paz indescriptible que desalentaba sus deseos de despertar.

Otros refieren haberse encontrado con sus seres queridos fallecidos o con ciertos espíritus,  que los convencieron de volver a su cuerpo porque su hora aún no había llegado.

Esa fue precisamente la experiencia vivida por Pam Reynolds (1956-2010), una cantante y compositora norteamericana que fue operada a los 35 años de un aneurisma cerebral muy grave, por el Dr. Robert Spetzler en el Instituto Nerurológico de Barrow, en Phoenix, Arizona.

Para realizar la cirugía, los neurocirujanos debieron provocarle un paro cardiaco hiportémico o sea enfriarle el cuerpo a una temperatura de 10 grados y producirle la muerte clínica, deteniendo su corazón,  la irrigación sanguínea y la actividad de su cerebro durante dos horas, para evitar daños cerebrales.

A pesar de que Pam estaba totalmente anestesiada, con los ojos vendados y los oídos tapados, cuando recuperó la conciencia aseguró haber oído el sonido del instrumental eléctrico que fue utilizado para perforar su cráneo, verse a sí misma desde arriba,  visualizar la sala de operaciones, ver con claridad todos los instrumentos quirúrgicos y escuchar todo lo que decían los médicos durante la operación.

Todo lo que percibió Pam en la sala de operaciones mientras estaba clínicamente muerta, fue confirmado posteriormente por los médicos.

Pam también se sintió atraída hacia una luz donde se movían varias personas;  entre ellas su abuela fallecida y un tío que había muerto muy joven.

Tanto los conocidos como los extraños que estaban en la luz,  le dijeron que tenía que volver, porque no era su hora,  pero ella se negaba a abandonar ese estado de plenitud y felicidad que sentía.

La explicación de la física cuántica sobre este fenómeno es que el cerebro procesa la información en relación con el todo.  Cuando la vida biológica llega a su fin, queda el campo, que se expande y se entrelaza con otros campos cuánticos.  

Los escépticos opinan que la experiencia de Pam sucedió cuando su cerebro estaba todavía de algún modo activo, aunque queda la incógnita sobre cómo pudo Pam escuchar las conversaciones y percibir los objetos de la sala de operaciones en tiempo real.

Malena
Fuente: Documental de Discovery Channel.