El Misterio de los sueños



Un sueño es una vivencia tan real como cualquier experiencia que sucede durante la vigilia.  Tanto es así que a veces dudamos si estamos soñando o estamos despiertos.

Sin embargo, en el sueño normal, tanto los hechos como los personajes y los objetos no aparecen tal cual son sino que se manifiestan en forma simbólica.

El simbolismo de los sueños es una representación universal arquetípica,  pero su significado difiere,  según el soñante.

Por ejemplo,  si se sueña con el mar, el agua es el símbolo del nacimiento y también de la muerte, del infinito, de lo desconocido o de los cambios. 

Para algunos puede significar un nuevo nacimiento, para otros un cambio, un viaje largo o el temor a lo desconocido.

Durante el sueño se pueden experimentar todas las emociones, como placer, dolor o miedo; con un cuerpo superdotado que puede moverse según las necesidades que se presenten,  correr sin cansarse, saltar, volar, nadar aunque no se sepa cómo hacerlo, hablar idiomas desconocidos y hasta conectarse con seres queridos fallecidos y recibir mensajes de ellos.

Freud decía que los sueños son la”vía regia” o sea el camino principal,  para descubrir los contenidos simbólicos inconscientes y conocer los traumas de la infancia.

Para Jung el concepto de inconsciente tiene un significado más amplio porque no se limita solamente a las experiencias de la infancia sino que incluye el inconsciente colectivo, del que derivan los arquetipos, que son cada una de las ideas, símbolos o representaciones que existen en la memoria colectiva, comunes a todos los individuos o a grupos étnicos particulares.

Estos símbolos, que son arquetípicos, aparecen en los sueños, disfrazando su significado real, con la función de evitar que el soñante se despierte sobresaltado y permitirle el buen dormir.  Por lo tanto, la pesadilla sería el fracaso de la elaboración simbólica onírica.

El inconsciente colectivo explicaría, entre otras cosas, la simultaneidad de los descubrimientos científicos en distintas partes del mundo, alejadas entre sí, los mismos símbolos y rituales religiosos en continentes distintos que aún no se conocían y la similitud en los conocimientos arquitectónicos y astronómicos en distintas culturas.

No existe evidencia científica que corrobore que los sueños puedan tener valor predictivo, sin embargo, en muchos casos se han registrado coincidencias significativas entre sueños previos y los hechos acontecidos posteriormente.

Malena

Fuente:   “Revisión de la teoría de los sueños”; “Nuevas lecciones introductorias al Psicoanálisis”; Obras Completas, Tomo 3; Sigmund Freud.
“El Yo y el Inconsciente”; Carl Gustav Jung.