Fenómenos Paranormales



El neuropsicólogo Peter Brugger, de la Universidad de Zurich,  es profesor de Neurología de la Conducta y de Neuropsiquiatría, es miembro del Centro de Fisiología Humana Integradora de la misma universidad y dirige el departamento de Neuropsicología del Hospital Universitario de Zurich.

Desde que comenzó a incursionar en el ámbito de la biología, se ocupa de investigar los temas que se encuentran en terrenos fronterizos de la psicología, entre ellos la creencia en fenómenos paranormales.

Brugger estudia fenómenos como la telepatía o la videncia y encuentra que existe una característica humana universal: las personas perciben contenidos significativos en los acontecimientos casuales que resultan negativos, y si a ellos se les agrega el miedo a lo desconocido, a esos hechos se le comienzan a atribuir influencias negativas.

Brugger comenzó a estudiar biología para comprobar de manera objetiva el presunto fenómeno de la transmisión del pensamiento, pero centró su investigación más en la creencia en ellos que en los fenómenos en sí mismos

Demostró que el cerebro de las personas que se inclinan a creer en fenómenos sobrenaturales presenta un dominio del hemisferio cerebral derecho; y que la creencia en estos fenómenos se podría relacionar con la forma en que trabajan los hemisferios cerebrales izquierdo y derecho.

Las personas que tienen mayor dominio de su hemisferio cerebral derecho son capaces de desarrollar asociaciones con mayor libertad, aunque sus ideas no sean  siempre correctas.

La creatividad siempre estuvo ligada al pensamiento mágico y en la posibilidad de creer en lo imposible.  La imaginación por ejemplo,  es una de las aptitudes más importantes que requiere la ciencia.

A los escépticos les resulta más difícil aportar ideas originales ya que suelen transitar caminos más trillados.

La superstición es un grado de locura que les falta a los escépticos, o sea atreverse a derribar barreras, transgredir normal, superar fronteras, prestarle atención a las coincidencias significativas y descubrir el sentido de los hechos que parecen ocurrir por azar.

Por esta razón los científicos pueden no estar exentos de cierta inclinación a la superstición.

El famoso físico Niels Bohr fue criticado en cierta oportunidad por un colega por tener en la puerta de su casa una herradura colgada.

Le preguntó si realmente podía creer en algo así y él le contestó, que no pero que tenía entendido que también funcionaba si no se cree en ello.

La creencia nos puede llevar por caminos equivocados pero también puede ser la única forma de encontrar algo nuevo.

Tal vez es necesario permanecer siempre con la mente abierta a lo que pueda acontecer, sin inclinarnos peligrosamente a defender axiomas que son considerados como verdades últimas.

Malena

Fuente: “Mente y Cerebro”; No.64; sobre la entrevista realizada por Andreas Jahn y Amelie Tokaj al profesor Peter Brugger; por Andreas Jahn y Amelie Tokaj.