Niña armada en un jardín de infantes





Cuando uno cree que ya lo ha escuchado todo y que ya no hay nada que lo sorprenda, algo más sucede, que lo puede dejar estupefacto; una niña de cinco años puso en grave peligro a sus pequeños compañeros de jardín de infantes al llevar un arma cargada a la escuela y mostrarla como un trofeo.

La maestra creyó que se trataba de un juguete, pero enseguida pudo comprobar que el arma era verdadera.

La madre justificó la tenencia de esa arma diciendo que era para su protección personal, para poder defenderse en caso de sufrir un robo o un intento de violación.

Que hay niños precoces no hay ninguna duda y que los hay capaces de hacer cualquier cosa, también, por eso los padres tienen que cuidarlos y mucho y no dejar cosas peligrosas a su alcance

Las armas en los hogares al alcance de los niños ya han producido muchas tragedias y accidentes graves; y se ha cobrado la vida de varios menores en su propio hogar.

Los niños no son conscientes del peligro que representa la manipulación de un arma de fuego, tanto para ellos como para quienes los rodean. Sin embargo, todavía existen muchos padres que no piensan en las consecuencias que pueden derivar de tener armas en sus casas, aunque sean para defensa personal.

Acostumbrados a la cotidiana violencia que ven por televisión, a cualquier niño le puede parecer divertido y excitante tener el poder de un arma en sus manos, que pueden creer inofensiva, para sorprender a sus amiguitos y destacarse entre ellos.

No es la primera vez que estos graves incidentes ocurren en una escuela pero seguramente esta es la primera vez que pasa en un jardín de infantes.

Tampoco es la primera vez que para defenderse de posibles peligros, las personas mayores se arriesguen a tener armas cargadas en su casa, al alcance de sus hijos, exponiéndolos a un peligro mayor.

No hace mucho tiempo un padre mató a su propio hijo de un disparo, creyendo que se trataba de un intruso que intentaba ingresar a su casa.

Las armas las carga el diablo, porque también son muchos los que creyendo que su arma está descargada, mueren víctimas de ella.

La violencia es una plaga más que tal vez nunca se llegue a erradicar, porque es una enfermedad contagiosa que genera aún más violencia y cualquier discusión o pelea que comienza siendo inofensiva puede llevar a una persona iracunda a utilizar su propia arma para matar.

No es posible apagar un incendio tirando más leña al fuego, así como intentar defenderse puede ser mucho peor que entregarse sin resistencia.

La policía aconseja no resistirse ante los asaltos, porque los ladrones no tienen nada que perder y son capaces de hacer cualquier cosa para conseguir lo que quieren aún a riesgo de su propia vida.

Por otro lado, matar a alguien, aunque sea un ladrón, puede ser una experiencia difícil de olvidar por mucho tiempo.

Seamos sensatos e intentemos seguir creyendo en las instituciones, aunque nos resulte difícil, porque son los que las representan los que tienen la obligación de defendernos, porque si cada uno de nosotros pretende hacer justicia por su propia mano, no hemos avanzado sino retrocedido y con la excusa de querer defendernos nos estamos convirtiendo todos en potenciales asesinos.

Malena