La Enfermedad Orgánica y el conflicto psíquico - Psicología Malena Lede



Antes de un ataque al corazón, existe un conflicto que no se puede resolver y que es el que metafóricamente, rompe el corazón.

Hay muchos pacientes que si se les indaga cuidadosamente, manifiestan saber a ciencia cierta qué fue lo que les produjo su ataque al corazón.

No es raro que estos individuos hayan estado viviendo experiencias límites que ya no pudieron soportar y que hicieron que finalmente sus corazones estallaran.

Las experiencias que pueden provocar un ataque cardiaco no son situaciones precisas iguales para todos, sino que dependen de cómo son vividas esas difíciles situaciones de estrés en cada caso.

En el libro “Travel”, Michael Crichton, relata que un día se preguntó si podía ser posible que el ataque cardiaco tuviera un significado diferente para cada paciente.

Para confirmar su hipótesis se dedicó a preguntarles a sus pacientes internados en el hospital, qué era lo que pensaban sobre su enfermedad, o sea, según ellos, qué había sido lo que les había provocado el ataque cardiaco.

Pudo comprobar que cada uno tuvo una rápida respuesta categórica:

-Me despidieron de mi empleo
-Me desalojaron de mi casa porque no pude pagar la hipoteca
-Me trasladan a otro lugar y mi esposa no me quiere acompañar
-Mi esposa me pidió el divorcio

Ese yo verdadero que está más allá del ego es el sabe qué es lo que lo enfermó, el que se da cuenta de todo, el testigo silencioso que prefiere darle el principal lugar al ego que es la parte del yo que se aferra a las ilusiones, que compite, compara, analiza y quiere destacarse de los demás a costa de todo.

A veces, un sistema circulatorio lleno de fallas puede durar mucho tiempo sin ningún síntoma, sin embargo el ataque cardiaco suele aparecer justo cuando un sujeto se enfrenta a un conflicto psíquico que no puede resolver.

No se trata solamente de una falla cardiaca sino de un corazón roto en un sentido espiritual y no físico.

El cuerpo es una manifestación palpable de los dramas que vive una persona que son expresados claramente a través de los trastornos más o menos graves que padecen sus órganos.

Esto ocurre porque la mente actúa sólo racionalmente, sin embargo, más allá de la razón se encuentra el sentido de la vida y el mundo de los significados de un sujeto.

Una paciente que sufría de esquizofrenia, que atendí durante algunos años, solía repetirme: - Lo que yo necesito es poder descubrir el “raigón” que tengo adentro, para poder curarme.

Es sabido que algunos esquizofrénicos inventan palabras. En este caso es probable que se refiriera a lograr encontrar la “raíz” de su problema, su conflicto intrapsíquico sin resolver.

Fuera del campo de la racionalidad al mundo científico le resulta difícil aceptar razones que no puedan analizarse en un laboratorio, aunque ya se hayan demostrado las consecuencias que produce el estrés en el cuerpo físico.

Aún se sabe muy poco sobre la energía, de modo que es posible que las emociones y los sentimientos puedan contribuir energéticamente a interrumpir el equilibrio orgánico y provocar el desarrollo enfermedades graves; pero también es posible que se pueda descubrir al mismo tiempo el poder energético que tenemos para auto curarnos.

Por ahora, el autoconocimiento y el perdón parecen ser el punto de partida para lograr disminuir el sufrimiento.

Malena