Mi pareja ya no es como antes - Psicología Malena Lede




Nada ni nadie es como antes, nosotros tampoco, porque todo cambia y las relaciones también.

Una relación nueva está llena de novedades, porque ambos recién se conocen y ninguno de los dos sabe nada del otro.  Pueden hablar horas sin parar, disfrutar hasta del roce de sus manos y no ver la hora de verse nuevamente.

Pero cuando ya está todo dicho, comienza la rutina y comienzan a conocerse mejor, ambos se pueden relajar confiados y atreverse a mostrarse como son.

Sería terrible que una nueva relación se mantuviera siempre igual, porque la pareja estaría siempre tensa, nunca podría conocerse bien y aunque lo nuevo siempre atrae, la comodidad de estar con alguien conocido, de saber lo que se necesita conocer de esa persona, de contar con ella, de tener  la posibilidad concreta de construir algo juntos y seguir creciendo, no se compara con las incógnitas que guardan los primeros momentos.

Sin embargo, la mayoría se aferra a las primeras emociones y pretende sentir eso siempre y cuando eso se diluye creen que es el fin.

La vida fluye y aparecen nuevas oportunidades personales que muchas veces se suelen dejar pasar por alto para poder vivir más intensamente un vínculo amoroso. Pero las oportunidades no pasan dos veces y si no se  aprovechan  desaparecen rápidamente.

Existe el criterio generalizado que una relación de pareja tiene que ser una fuente de emociones permanente y una pasión arrolladora.  Si fuera así no podríamos hacer otra cosa.  Hay que rescatar los sentimientos que son los que perduran y darles importancia a ellos.

No exijan demasiada atención, no sean celosos y posesivos, no tengan miedo a la pérdida, no se obsesionen, vivan y dejen vivir, respiren y dejen respirar, disfruten y dejen disfrutar.

La pareja no lo es todo, pero si encuentran a quien amar asuman el compromiso y sean leales, no engañen, es preferible terminar una relación que seguir con engaños porque se pierde lo más importante que es el respeto.

Sean ustedes mismos lo más que puedan, porque son únicos y esa unicidad es lo que atrae, no otra cosa y sena capaces de eludir las tentaciones pasajeras.

Malena Lede - Psicóloga