La importancia de un amigo verdadero-Psicología Malena Lede




No se puede generalizar cuando hablamos de seres humanos porque cada persona es única e irrepetible; sin embargo, podemos hablar sobre qué pasa en el momento histórico actual con respecto a la amistad.

Creo que la mayoría tiene la sensación de que la civilización ha alcanzado una cúspide y que ahora le toca bajar, que tendrá que despojarse de muchas comodidades y dejar de consumir sin pensar; que llegó la hora de la verdad, de dejar atrás la apariencia para dar lugar a la inteligencia, y de dejar de copiar modelos ridículos que nada tienen que ver con la identidad personal.

Esa extraña sensación apocalíptica que nos envuelve a todos es como un virus troyano que borra la creatividad y conduce a la depresión, que nos lleva al egoísmo y a la violencia y a no poder descubrir el sentido de la existencia.

En este ambiente de incertidumbre que nos rodea, un amigo es el alma gemela que nos acompaña en el transcurso del drama de la existencia, alguien con quien siempre podemos contar y  en quien siempre podemos confiar.  Es la persona que no nos aburre con su charla porque entre ambos hay afinidad y que nunca nos va a defraudar.

El amigo se valora ahora más que nunca porque es nuestro par, alguien contemporáneo confiable con quien nos podemos identificar cuando se toma conciencia que la masa que nos rodea no tiene identidad, que van donde todos van y comen lo que les dice la publicidad; que se visten todos igual y que sólo se atreven a hacerse un tatuaje más; que tienen su propia lengua para hablar y el último recurso tecnológico para impresionar.

El amigo de verdad, se convierte así en una balsa salvadora en el medio del mar, con él no necesitamos actuar, podemos arriesgarnos a pensar y no corremos el riesgo de que nos vaya a criticar.

El único amigo es el que no nos exige más, el que nos acepta como somos y que no se burla de nuestra personalidad, el que nos apoya y nos acompaña y que nos deja en libertad.

La etapa del amigo inseparable suele terminar cuando alguno de los dos se enamora de verdad.  Es en ese momento en que generalmente se rompe el vínculo, porque el amor de pareja casi nunca tolera la competencia ni tampoco a un rival.

El amigo es el espejo en que podemos vernos en forma más real y desprendernos de él es un duelo que pocas veces podemos realizar, porque  deja un vacío difícil de llenar y la sensación de haber sido desleal.


Malena Lede - Psicóloga