Sufrir de Anorexia y Bulimia a los cuarenta - Psicología Malena Lede

La anorexia y la bulimia suelen ser patologías propias de los adolescentes, que preocupados por considerarse obesos aún siendo delgados, se someten a una rutina de excesivos ejercicios físicos y a toda clase de dietas estrictas, dejan de comer o se provocan el vómito cuando tienen un atracón.

Sin embargo, también las personas de cuarenta años pueden sufrir de esta grave enfermedad que puede llevar a una muerte prematura.

En este caso se trata de una mujer sin pareja, con dos hijos, que vive pendiente de su cuerpo;  sus amigas le envidian su figura, pero sólo ella sabe que vive haciendo dieta y ejercicios y que cuando come de más se provoca el vómito.

Aunque se da cuenta que su problema no es solamente su físico, porque se siente sola, no busca ayuda, sigue adelante con sus rutinas y dispuesta a someterse a cirugías plásticas ni bien comiencen a manifestarse los signos de la vejez.

El miedo a envejecer comienza temprano; muchas veces antes de cumplir los cuarenta.  Esta década parece ser una barrera difícil de franquear sin rebelarse y sin buscar la forma de hacerle una zancadilla a los años que señalan la marcha inexorable del tiempo.

Sin embargo,  la expectativa de vida actual, les puede deparar a estos jóvenes que se sienten viejos, como mínimo otros cuarenta años más,  para vivir una nueva etapa enriquecida por la experiencia y en plena plenitud física si se lleva una vida física, mental y espiritual saludable y en armonía.

Resistirse a la propia finitud, que obviamente es inevitable,  no permite disfrutar del presente por miedo al futuro y obliga a buscar alternativas ilusorias que intentan vanamente detener el tiempo.

Más que preocuparse por  el físico habría que ocuparse en intentar alcanzar la paz del espíritu, volver a conectarse con la totalidad, sentirse parte de algo más grande e intentar experimentar algún modo de trascendencia.

Creo que despedirse de este mundo no resulta tan difícil cuando uno siente que ha hecho todo lo que pudo para que este mundo sea mejor.

Malena Lede - Psicóloga