Embarazo no deseado - Psicología Malena Lede




Un embarazo puede ser deseado por un motivo y rechazado por otro.  Se puede desear tener un hijo por varias razones,  pero no ahora.

Tener hijos es la ambición de muchas mujeres pero a veces, cuando se concreta, pueden parecer inoportunos.

Criar un hijo es una tarea de tiempo completo y no es fácil, porque los hijos exigen atención, amor, cuidados y demandan mucho trabajo.

Un niño necesita al padre y a la madre, sin embargo, eso no impide que la madre trabaje, porque ambos pueden organizarse bien y buscar una buena sustituta que los reemplace las horas  que no están.

Hoy en día la mayoría de las madres jóvenes trabajan y también tienen niños sanos y felices, sólo se necesita que la pareja esté dispuesta a cumplir el rol de padres el tiempo que le permitan sus ocupaciones y haciendo lo posible para que durante su ausencia su hijo reciba los cuidados y las atenciones que necesita.

A veces son las abuelas las que se ofrecen a cuidar a sus nietos y esa es una buena opción,  otros padres consiguen personal de confianza para que se ocupe del niño y también existen guarderías donde reciben a los chicos desde los dos meses de edad.

Actualmente algunos profesionales trabajan desde su hogar algunas horas y eso les permite controlar mejor a la persona que cuida a sus hijos.

Lo importante es que ambos integrantes de la pareja sean  responsables como padres, le brinden a sus hijos afecto y atención pero también se puedan permitir la oportunidad de hacer lo que les gusta y desarrollar lo que saben hacer bien sin vivir a sus hijos como cargas y sin dejar de ser padres; ya que si los niños pueden contar con el cuidado y el afecto de un buen sustituto crecerá sin problemas.

Pero a veces un embarazo puede ser usado para formalizar una relación que no se define.  Al principio  les parecerá ideal pero es posible que luego, cuando ambos se encuentren llenos de responsabilidades y problemas,  no se sientan preparados para enfrentarlos.

Así, lo que fue amor se transformará en odio y el hijo será el que sufrirá más sólo por haber cometido el pecado de haber nacido.

En la actualidad no hay excusas que puedan justificar un embarazo, ya que existen muchos métodos de control de la natalidad perfectamente eficaces.  Sólo hay que ser responsables y tomar la decisión,  estando ambos bien seguros de querer asumir la paternidad con plena disposición y alegría.

Malena Lede - Psicóloga