EL FIN DEL TRABAJO - http://Psicologia-malenalede.blogspot.com




El avance de la tecnología amenaza con dejar sin trabajo a miles de personas en los países más desarrollados; principalmente a aquellos que realizan tareas rutinarias con ingresos bajos.

El os, como recepcionistas, oficinistas y otras ocupaciones actualmente a cargo de personal subalterno.

Sin embargo, no siempre una nueva tecnología tiene éxito; a lo largo de la historia, algunos inventos, que parecían revolucionarios, no prosperaron por cuestiones económicas o sociales o porque por distintas razones  resultaron ineficaces.

Así como está en peligro la mano de obra que hoy está reemplazando las máquinas, sucede lo contrario con los trabajos que exigen habilidades especiales, porque no se consigue personal para manejar esas máquinas.

La búsqueda del equilibrio debería centrarse en instruir adecuadamente a las próximas generaciones para satisfacer la demanda laboral que se necesita para la aplicación de la nueva tecnología.

Los trabajos manuales que no puedan ser reemplazados por máquinas costarán fortunas, porque obviamente serán muy pocos los que se dedicarán a esas tareas.

Adaptarse a los cambios tecnológicos siempre ha sido muy cruento para la humanidad, sin embargo, a la larga beneficiaron a todos.

La revolución industrial fue el fin de una época y trajo como consecuencia el reemplazo del trabajo artesanal por la línea de montaje; un cambio que provocó el final de los oficios pero que también fue el inicio del trabajo en las fábricas a gran escala.

La nueva tecnología impone que la educación formal de niños y jóvenes incluya desde la escuela primaria la adquisición de los conocimientos necesarios para poder responder a la demanda laboral futura.

Una nueva tecnología produce la pérdida de antiguos puestos de trabajo pero también es la fuente de  nuevas necesidades laborales.  La clave es aprender a dominarla y adaptarse a ella.

Malena Lede - Psicóloga