EL PROBLEMA DE NO TENER TIEMPO - http://psicología malenalede.blogspot.com




Vivimos en una sociedad alienante expuestos a los patógenos virus de los excesos.  Exceso de información, exceso de trabajo, exceso de planes, exceso de ocupaciones, exceso de trámites, exceso de estimulación, exceso de exigencias, etc.

Cumplir con la agenda llena, con el trabajo y con la familia se convierte en una misión imposible.
La vida moderna es una sucesión de obligaciones que nos producen estrés, que puede llegar a matarnos y muchos se obsesionan con el control y comienzan a padecer de ataques de pánico.

Algunos están tan cansados al final del día que no pueden dormir entonces toman pastillas para poder conciliar el sueño, y al día siguiente tienen que tomar pastillas para no dormirse en el trabajo.
Necesitamos relajarnos, distinguir lo necesario de lo intrascendente, aprender a soltar y a decir que NO.

En una charla de TED, uno de los sobrevivientes del avión que cayó en el río Hudson, en USA, ya hace unos años, contó cómo vivió lo que pensó que serían sus últimos momentos, cuando después de haber perdido dos motores,  el capitán de la nave les informó a los pasajeros que se prepararan para el impacto.

Frente a su muerte inminente se dio cuenta que hasta ese momento había pensado que era eterno, que la muerte era algo muy lejano que le pasaba a otros,  pero que él tenía tiempo de sobra.

Tomó conciencia que todo puede cambiar en un minuto, que había postergado cosas que debía haber hecho, que había perdido tiempo discutiendo con muchos por defender su propio criterio y que aunque el hecho de morir da tristeza, no da miedo.

Afortunadamente todos los ocupantes del avión se salvaron gracias a la extraordinaria pericia del piloto, pero esa experiencia le sirvió a esta persona,  para aprender a vivir la vida de otra forma, a no discutir más con su esposa, a no imponer más su razón,  a apreciar cada momento como si fuera el último, y  a no guardar nada para mañana y usar todo.

Antiguamente no se hablaba de sexo aunque formara parte de la vida, ahora no se habla de la muerte,  no se realizan velatorios y se esconde a los  muertos, aunque la muerte sea la única certeza que tenemos y todo lo demás pura incertidumbre.

Sin embargo, la conciencia de que la muerte que tratamos de negar nos acecha todos los días y que el futuro es sólo una utopía, es lo que nos puede cambiar y darle sentido a esta vida.

Malena Lede