LA VIDA "LIGHT" - Psicología Malena Lede


La ansiedad promueve la acción y ésta favorece los cambios culturales y sociales con la ayuda de  nuevos inventos.

Inventar ofrece la posibilidad de cambiar lo nuevo por lo viejo, o sea de mejorar lo anterior de tal forma que todos quieran tenerlo. Lo nuevo tiene forzosamente que desplazar lo viejo que necesariamente debe resultar inútil y antiguo.

Si observamos bien a nuestro alrededor la imperiosa búsqueda del cambio no se reduce solamente a los avances tecnológicos sino también al trabajo, la moda, los juguetes, los accesorios,las joyas, los lugares de esparcimiento, los destinos turísticos, las parejas, etc.

Los edificios se diseñan para que la gente no viva allí mucho tiempo, para que eventualmente puedan ser modificados, los autos para que duren poco y todo lo que se fabrica intenta cubrir principalmente necesidades transitorias, para mantener relaciones efímeras, como si no hubiera futuro y se temiera un apocalypsis.

El desarraigo hace que la gente opte por cambiar de trabajo, se mude de un lugar a otro y pierda a los amigos, a la novia y hasta a los hijos.

Los perfiles laborales también cambian, cada vez más son preferidas las personalidades agresivas y rápidas que generan buenos negocios en poco tiempo y se dejan de lado quienes amenazan con detener esa marcha acelerada hacia el progreso.

La identificación con la empresa ya no se valora porque sólo se tienen en cuenta las ganancias y el hecho de que las personas se pueden cambiar por otras.

Lo que se puede observar,  es que con este estilo de vida se puede eludir fácilmente el compromiso y la culpa, obteniendo un nuevo sentido de libertad no conocido que puede hacer sentir a la gente muy cómoda.  Debe ser por eso que hoy en día son pocos los que todavía llaman a su madre.

La realidad es que vivir el presente justifica emprender únicamente obligaciones transitorias, sin futuro ni pasado, centradas en el aquí y ahora.

Es como si de pronto todos se hubieran dado cuenta de lo limitado de la vida y entonces creyeran que pueden vivir sin valores ni ataduras y les resultara lo mismo cualquier cosa, porque creen que eso no tiene ningún costo y que todo se olvida muy pronto y a nadie le importa.

Así nos estamos convirtiendo en estrellas fugaces dispuestos a aparecer y desaparecer sin hacer ruido y sin dejar ninguna huella a su paso, vacíos por dentro y por fuera llenos de cosas.

Malena Lede - Psicóloga