QUE HACER PARA SENTIRSE ACEPTADO

Las relaciones personales suelen ser difíciles, principalmente para los más jóvenes. A veces, este problema perdura en el tiempo y luego se convierte en una dificultad para lograr la estabilidad laboral y también para establecer vínculos duraderos.

Contrariamente a lo que muchos creen, tener buenas relaciones con los demás no depende de ningún factor físico particular, ni de todo lo que saben  ni del dinero que tengan sino del modo de actuar y de tratar que aprendan y de comprender a los otros.

Lograr salir de sí mismo, o sea de abandonar la propia zona de confort para poder ponerse en el lugar de otro es algo que a muchos les resulta imposible.

Aunque esta disposición suele ser espontánea para muchos, otros la tienen que aprender debido a muchas razones.  Esas razones que no permiten relacionarse mejor,  provienen de la infancia y del modo en que se vivieron las experiencias.

Todos necesitan desde pequeños sentirse amados, apreciados y valorados, sin embargo, esta necesidad a veces se torna demasiado exigente y en muchos casos, por razones difíciles de entender, a algunas personas las manifestaciones de amor que les brindan sus padres nunca las logran satisfacer.  Claro que en otros casos existen padres que no saben demostrar el afecto,  generalmente porque tampoco lo han recibido, o que por distintas razones personales no tratan igual a todos sus hijos.

Lo cierto es que todos, quien más quien menos, arrastran una mochila del pasado con todas las frustraciones a cuestas que perduran,  inclusive en la edad adulta y que afectan sus relaciones.

Existen muchos libros de psicología que enseñan a llevarse bien con la gente, pero por lo general se trata de técnicas de manipulación.

Desde mi punto de vista existen CUATRO factores que pueden ayudarlos a mejorar e incrementar sus vínculos:

INTELIGENCIA
RESPETO
HONESTIDAD Y
BONDAD

Inteligencia para aprender a ubicarse en cada situación en forma natural y espontánea, sin pretender ser quienes no son sino  precisamente siendo quienes realmente son e intentando escuchar e interesarse atentamente por los demás.

Respeto y consideración por todos, sean quienes sean y hagan lo que hagan.  Respeto es aceptarlos como son, no burlarse de nadie, reconociendo las capacidades de cada uno y estimulándolos en sus logros.

Honestidad con todos, no mentirles, sin aparentar lo que no son y siendo capaces de reírse de los propios defectos.

Bondad de corazón, no siendo crueles, insensibles, agresivos o violentos.y ayudando a todos en la medida de sus posibilidades.

Estamos viviendo una época de mucha violencia, que nos hace pensar que sólo pueden sobrevivir los más peligrosos y audaces, los que se apropian de lo ajeno sin ningún cargo de conciencia, quienes se burlan de los más débiles, quienes sólo se saben manejar a los golpes porque casi no tienen vocabulario ni han asimilado educación alguna.

Su mediocridad e ignorancia se oculta bajo una máscara de bravura desmedida enfrentando el riesgo sin medir las consecuencia, aunque internamente tengan una autoestima muy baja y sientan que no son nada ni tienen nada que perder.

No pueden compararse con nadie más que con el potencial que tienen ustedes mismos el cual tiene que ser descubierto y desarrollado.