Dostoyevsky y el parricidio - Psicología Malena Lede




Según el análisis que realizó Freud, de la biografía y obra de Dostoyevski(1821-1881)escritor ruso, profundo conocedor de las debilidades humanas, fue un neurótico, un moralista y un pecador; siendo su aspecto moralista el más accesible al análisis.

¿Qué es ser moral? Moral es aquel que frente a la tentación que siente internamente logra vencerla; mientras quien cede a la tentación y luego se arrepiente, por remordimiento, o por exigencias morales, elude la renuncia, que es el mandato esencial de la moralidad, como propósito práctico de la humanidad.

Dostoyesvski tenía gran necesidad de ser amado; y esta exigencia se hacía evidente a través de sus actos de bondad y de ayuda, incluso a personas que debería haber odiado.

Sin embargo, Freud incluye a Dostoyevski entre las personalidades criminales, por la elección de los personajes de su producción literaria, seres egoístas, violentos y asesinos, también por su pasión por el juego y por haber llegado a violar en la realidad a una adolescente.

Su fuerte instinto de destrucción se manifestaba en su masoquismo y su sentimiento de culpa, también en los rasgos sádicos de su carácter, en su irritabilidad e intolerancia y en su placer en atormentar a las personas que más quería.

En las situaciones menos importantes era sádico con los demás pero en circunstancias de mayor compromiso era sádico hacia adentro, o sea masoquista, siendo capaz de mostrarse a la vez bondadoso y solidario con los demás.

Era un sadomasoquista y un criminal, con dotes artísticas extraordinarias, pero era también un neurótico que no es inevitable.

Padecía de ataques que parecían epilépticos, pero que Freud suponía se trataba de histeroepilepsia, o sea una forma de histeria grave, porque la epilepsia, en la mayoría de los casos, produce deterioro mental y es evidente que su afección no le impedía tener un elevado rendimiento intelectual.

Los ataque que sufría Dostoyevski adoptaron la forma epiléptica recién a los 18 años, cuando tuvo que padecer la terrible experiencia del asesinato de su padre, que hace realidad el deseo inconsciente derivado del Complejo de Edipo.

Desde el punto de vista psicoanalítico, este suceso ocurrido en la vida de Dostoyevski es el núcleo de su neurosis.

También es indudable la relación que existe entre la muerte trágica de su padre y el asesinato del padre en la ficción de “Los hermanos Karamazof”.

El ataque epiléptico de Dostoyevski tiene el valor de un castigo por haber deseado inconscientemente la muerte de su padre odiado, que había sido un hombre cruel, violento y muy severo, y por haberse cumplido su deseo.

De esta forma, Dostoyevski se identifica con su madre y adopta como objeto erótico a su padre, siendo ambos impulsos reprimidos.

Dostoyevski también estuvo preso en Siberia como delincuente político y se cree que durante su cautiverio no sufrió ningún ataque epiléptico, supuestamente porque la cárcel era suficiente castigo, como ocurre con muchos muchos delincuentes que piden y desean el castigo.

Los remordimientos de Dostoyevski por haber deseado la muerte de su padre, determinaron en parte su sumisión ambivalente ante la autoridad del Estado y ante la Iglesia, oscilando toda la vida entre la fe y el ateísmo.

El juego era también un modo de auto castigo para Dostoyevski, ya que lo hundía en la más absoluta miseria.

Malena
Fuente: “Obras Completas de Sigmund Freud”; Tomo III; “Dostoyevski y el parricidio”.