Recupera tu pelo y tu autoestima - Psicología Malena Lede



Muchos consideran la caída de su cabello como un cambio desfavorable en su esquema corporal. Les cuesta integrar esa característica, que aunque es común en la mayoría de los hombres, constituye una amenaza que puede producir pérdida de autoestima y complejo de inferioridad.

Algunos lo asocian la alopecia con la edad y se sienten viejos, otros prueban todos los recursos que existen para revertir este problema que les provoca pérdida de su autoestima y otros complejos, los menos son los que ignoran los que les ocurre y no se sienten afectados por ella.

Lo cierto es que más de la mitad de la población masculina europea sufre de alopecia androgenética, y son muchos los que no la aceptan.

Hasta hace unos años no existía nada que pudiera evitar la caída del pelo principalmente en los hombres, pero afortunadamente ya hace algunos años que existen tratamientos eficaces a base de “minoxidil” y “finasterida”.

La droga minoxidil se empleaba para tratar la hipertensión, y la finasterida, también conocida como “propecia” se utilizaba para el tratamiento de la hipertrofia de la próstata; pero pronto se descubrió que ambas, además de su efecto conocido, también hacían crecer el pelo.

Estas drogas se pueden tomar a la vez y resultan eficaces cuando la calvicie es incipiente; pero también es posible recuperar el pelo que se perdió hasta cinco años atrás; lamentablemente, después de ese tiempo el folículo piloso ya no responde.

En su libro “Cuidemos nuestro pelo”; Ramón Grimalt aclara que este tratamiento no cura porque si se deja de tomar no mantiene su efecto, de manera que hay que continuarlo toda la vida.

La “finasterida” se puede tomar sin problemas hasta los cincuenta años, pero después de esa edad puede disminuir la potencia sexual.

Es prudente que el médico clínico tenga conocimiento sobre la toma de este medicamente, porque reduce a la mitad un indicador de posible cáncer de próstata y además, en el caso de los deportistas, como aumenta los andrógenos, deben declararlo en el control antidopaje.

En cuanto al minoxidil, no suele tener efectos secundarios siempre que se respeten las indicaciones.
En un futuro próximo, las células madre, obtenidas de los propios folículos pilosos y que son las que llevan toda la información genética, harán crecer el pelo perdido hace tiempo y el problema de la caída del pelo será historia.

Por ahora, solamente se utiliza esta técnica en ratones, cultivando in vitro células madre extraídas de la raíz de un pelo, para que se multipliquen e inyectándolas en las zonas deseadas.

La pérdida del pelo está asociada a las hormonas, a la genética, al estrés y a la alimentación. Es un proceso lento que comienza en la pubertad, cuando los testículos comienzan a producir testosterona.
Actualmente existe otro recurso eficaz para quienes perdieron su cabello hace algunos años y que no han funcionado con las drogas arriba mencionadas, que es el trasplante de pelo.

El trasplante consiste en realizar microinjertos con dos o tres pelos que se extraen de la nuca para reemplazar la zona frontal y con tres o cuatro pelos para poblar la parte de arriba de la cabeza. La ventaja es que los pelos que se extraen de la nuca no vuelven a caer, porque el pelo de esa zona no sufre las consecuencias de las hormonas causantes de la alopecia.

La calvicie total es un recurso que está de moda y que algunos utilizan cuando empiezan a perder su pelo y no confían ni están dispuestos a realizar tratamientos.

Malena

Fuente: “Cuidemos nuestro pelo”; Dr. Ramón Grimalt, Profesor de dermatología de la Universidad de Barcelona.