EL SEXTO SENTIDO DE LOS ANIMALES - Psicología Malena Lede

    Los animales tienen capacidades que los humanos parecen haberlas perdido.  La ciencia no tiene suficientes  elementos para explicarlo pero la física cuántica nos ofrece una visión más amplia de estos fenómenos.

   La ciencia se limita a estudiar los fenómenos naturales respetando sus postulados básicos, considerando científico todo conocimiento que se pueda probar con la experiencia, cuyos resultados deberán ser confiables, universales y válidos.

  La física cuántica cuenta con la hipótesis de los campos mórficos, la existencia de formas de percepción que van más allá de cualquier capacidad racional.

  El Dr. Rupert Shaldrake, uno de los científicos becado de la Universidad de Harvard, se interesó en investigar sobre la capacidades inexplicables que tienen los animales, que nosotros como humanos hemos perdido.

  La física cuántica ha hecho posible ampliar la visión de la naturaleza que ayudará a todo científico a lograr una mayor comprensión del mundo.

  Después de una rigurosa investigación personal de miles de casos de propietarios y de entrenadores de animales, el Dr. Shaldrake llegó a obtener resultados sorprendentes que dieron lugar al libro de su autoría, titulado "De perros que saben que sus amos están camino de casa, y otras facultades inexplicadas de los animales"

  Los perros que quedan en los hogares mientras sus dueños no están, intuyen no solamente su proximidad sino la intención que tienen de volver a casa, aún estando muy lejos.

  Cuando el dueño de casa está en camino el perro corre hasta la puerta y se sienta a esperarlo y cuando suena el teléfono y el gato de la familia reconoce que del otro lado de la línea está una persona a la que está muy unido, animales que anticipan terremotos, caballos que encuentran el camino a su casa estando en un lugar desconocido.

   Son pocos los que no reconocen ni sorprenden las misteriosas capacidades perceptivas de los animales más allá de los cinco sentidos, atribuyéndolas a la casualidad, el olfato, al momento del día ó al hábito.

   El Dr. Rupert Shaldrake intenta explicar el concepto de campos mórficos adoptando la idea de que los organismos en desarrollo están formados por campos llamados morfogenéticos, con la capacidad de darle forma a la materia.

  Los campos son regiones auto organizadas de influencia, análogas a los campos magnéticos y otros campos reconocidos de la naturaleza.

  El concepto  de campos morfogenéticos es aceptado en biología pero realmente nadie sabe cómo operan, aunque se supone que en algún momento se podrán explicar desde la física y la química.

  Los campos evolucionan tal como lo hacen los organismos a los que les dan forma, tienen una historia y contienen una memoria intrínseca que Shaldrake denomina resonancia mórfica y cada campo forma parte de una familia de campos mórficos, los cuales le dan a todos sus características.

  Tal como los campos reconocidos de la física,  son regiones de influencia en el espacio-tiempo, que se encuentran dentro y alrededor de los sistemas que organizan.

  El campo se hace real mediante un salto creativo aunque todavía no se conoce la fuente de esta creatividad evolutiva.  Una vez que existe el nuevo campo o modelo de organización se fortalece mediante la repetición, dando lugar a la evolución de ese modelo, fenómeno que  este autor denomina resonancia mórfica.

  En lo que se refiere a los humanos Carlo Gustav Jung denomina a este tipo de memoria, inconsciente colectivo y también se puede relacionar con el concepto de orden implicado de David Bhom. 

  Las partes del sistema cuántico que han estado unidas alguna vez en el pasado retienen una conexión instantánea incluso a gran distancia, de modo que los seres vivos, individuos únicos y separados en el tiempo y el espacio, desde este punto de vista estamos todos interconectados.

 Los campos mórficos pueden ser influenciados por nuestra atención  y nuestra intención.  Los individuos pueden estar separados entre si sin poder comunicarse de modos tradicionales y aún así transmitirse información entre ellos porque los campos mórficos se extienden más allá del cerebro.

  Según este encuadre, los tests de inteligencia hoy en día son resueltos por la mayoría, aunque no los conozcan,  con mejores resultados que antes, hasta tal punto que ya se consideran obsoletos,  debido a la habilidad adquirida por muchos sujetos que los hicieron antes, lo que ha formado un campo mórfico que ya se ha extendido por repetición en el tiempo a toda la especie.

  El salto creativo es aprovechado por toda la especie y es una necesidad natural para mantener los sistemas dinámicos y la vida. 

Del libro  "De perros que saben que sus amos están camino a casa y otras facultades inexplicadas de los animales" de Rupert Shaldrake.