En Monte Grande, localidad del Gran Buenos Aires, Argentina, el equipo del Dr.Gustavo Bianchi, químico especializado en materiales, que se desempeñó como jefe de proyectos en la Comisión Nacional de Energía Atómica, fue el primero en el país en producir una sustancia, denominada poliacrilamida, que es capaz de purificar las aguas contaminadas con deshechos industriales.
El proceso de fabricación fue tan complejo que ningún ente oficial ni empresa local se arriesgó a apoyarlo. No obstante, después de algunos fracasos, el equipo de Bianchi ya cuenta con tres plantas que producen mensualmente 24 toneladas de este producto.
Esta sustancia hasta este momento se importaba a alto costo, pero gracias al arduo trabajo del Dr. Bianchi estas importaciones pueden ser evitadas e inclusive permitir la apertura de un mercado regional.
Chile ha comenzado a comprar en Monte Grande estas sustancias, que limpian las aguas residuales, que se obtienen a partir de hidrocarburos cada día más caros, pero que nuestro país produce con gas natural a más bajo costo.
Las poliacrilamidas están libres de patentes por lo tanto Argentina en pocos años podrá captar una buena parte del mercado sudamericano.
Estos entusiastas y jóvenes empresarios, ya están pensando en fabricar precursores de las poliacrilamidas, que son el ácido acrílico y la acrilamida, utilizando materia orgánica.
La escasez de recursos financieros es compensada nuevamente en nuestro país con inteligencia y mucho esfuerzo, demostrando estos argentinos una vez más con gran creatividad que a pesar de no contar con apoyo oficial ni privado alguno, se puede también lograr el éxito.
Ver también: Ecología y conciencia
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