En materia de problemas mentales, no siempre un médico clínico puede hacer una derivación, ya que también un psicólogo cumple con las condiciones académicas y cuenta con los conocimientos necesarios como para discernir en la primera entrevista, si su potencial paciente necesita atención psicológica o psiquiátrica, o ambas, o bien si su trastorno se refiere a otra especialidad médica.
Un psicólogo clínico atiende específicamente problemas de conducta, o sea todas las manifestaciones de comportamiento que resultan atípicas que le impiden a un individuo desarrollarse plenamente y crecer psicológicamente; que no le permiten insertarse en la sociedad y relacionarse con los demás, que dificultan sus vínculos afectivos y su trabajo, que le restan fortaleza para enfrentar las distintas etapas evolutivas, las situaciones de pérdida, los miedos y obstaculizan su posibilidad de mantener el equilibrio emocional durante las crisis.
Si un psicólogo llegara a hacer el psicodiagnóstico de una patología mental, es imprescindible que realice la derivación correspondiente al psiquiatra y si se dedica a hacer tratamientos psicológicos en pacientes con enfermedades mentales, continuar la terapia psicológica que necesita.
Aunque un psicólogo clínico está preparado para atender procedimientos psicoterapéuticos y realizar psicodiagnósticos para cualquiera de estas dificultades, dentro del área de la psicología existen especialidades, como por ejemplo, en psicoterapia de niños, de pareja, de grupo, educacional, laboral, vocacional, psicoanálisis, etc.; todas ellas con el grado de preparación académica que exige dicha especialidad en cada caso.
La duración del tratamiento dependerá del tipo de problema que se trate y de la orientación que haya elegido el psicólogo para desarrollar su profesión.
Existen psicoterapias breves, centradas en el aprendizaje, que consideran toda conducta un condicionamiento, por lo tanto, el tratamiento se centra en implementar técnicas para cambiar hábitos dañinos que impiden a la persona desarrollar una vida normal. Estas son terapias de objetivos limitados que se centran solamente en el motivo de la consulta.
Otras técnicas pueden darle mayor importancia a solucionar problemas de percepción, dificultades para resolver conflictos intrapsíquicos o traumas del pasado.
En general, la mayoría de los psicólogos utilizan la teoría psicológica operativa para cada paciente, no sólo con el único objetivo de quitar sus síntomas sino también con el propósito de conocer las causas de esos síntomas para poder implementar el procedimiento terapéutico más adecuado.
En cuanto al rol de psiquiatra, esta disciplina es una especialidad de la medicina, o sea, luego de recibirse de médico, un profesional puede adquirir la especialidad en psiquiatría, preparación que le permite ejercer como médico psiquiatra, y que se centra principalmente en la psicopatología, o sea en el conocimiento de las enfermedades mentales conocidas como de etiología orgánica y en la especialización en drogas psicotrópicas.
Un psiquiatra no tiene preparación académica suficiente como para realizar terapias psicológicas. Solamente puede estar en condición de realizar psicoanálisis si realiza un curso de cuatro años en una entidad psicoanalítica reconocida que le otorgue el certificado.
Un médico psiquiatra, solamente está habilitado a recetar el psicotrópico que corresponda, después de la derivación médica o psicológica correspondiente y si el paciente necesita psicoterapia trabajar en forma combinada con un psicólogo.
Los únicos profesionales con preparación académica adecuada para realizar psicoterapia, son los psicólogos y los psicoanalistas diplomados.
Malena
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