Vidas y Vueltas - Capítulo XVI - Roma


A las 11,30 a.m. abandonaron Venecia para dirigirse a Roma, la ciudad de las siete colinas.

Después de cruzar los Apeninos a través de numerosos túneles y recorrer varias regiones bellísimas de Italia, que es como un jardín, luego de siete horas de viaje llegaron al hotel.

La mañana siguiente era domingo de Pascua. Recorrieron iglesias y cuantiosos monumentos de Roma que es como un enorme museo al aire libre, donde en cada calle, cada rincón y cada esquina se encuentran huellas de dos mil años de antigüedad; y luego entraron al estado del Vaticano que tiene una población estable de trescientos habitantes.

El ingreso al Vaticano es una gran avenida bordeada de columnas blancas que termina en Plaza San Pedro, donde está la catedral y donde ya se encontraban concentradas miles de personas deseosas de ver y escuchar el mensaje del Papa, y recibir su bendición en 55 idiomas.

Martha habló por teléfono con su prima Marisa, que vive en Grottaferratta, localidad próxima a Roma, hija de su tío, Vincent Murphy, el hermano menor de su padre, radicado en Italia desde su casamiento.

Vincent Murphy, conoció a su esposa Lucy en Comodoro Rivadavia cuando la familia de ella estaba proyectando volverse a Italia por cuestiones de trabajo. Fue un romance relámpago que terminó en boda y que lo llevó a emigrar a ese país obligándolo a dejar su tierra y a separarse de su familia.

Pero Vincent no se veía arrepentido por haberse ido, porque en ese país logró hacerse una posición y ser feliz con su familia, su esposa y dos hijas, ya casadas.

Utilizando sus conocimientos de italiano básico, Martha hizo los arreglos para encontrarse al día siguiente con su familia. En Italia el día posterior a Pascua es feriado porque se celebra "la pascueta”.

El encuentro fue muy emotivo, porque no se conocían personalmente.

Marisa y Giorgio, los primos de Martha, los llevaron en su auto a pasear por Roma y luego a su casa para almorzar.

Grottaferratta se encuentra en una colina arbolada muy pintoresca, lleva el nombre de una antigua iglesia que en sus comienzos comenzó siendo una gruta.

La casa de Marisa es muy grande y está construida respetando los desniveles del terreno. Abajo están el garage, el estudio de Giorgio, una salita de estar y una bodega. En el primer piso hay un gran living comedor con grandes ventanales que muestran una vista maravillosa y una gran cocina dispuesta con todo el confort imaginable; y más arriba se encuentran los tres dormitorios con las demás dependencias. Los muebles son de impecable estilo y todo parece nuevo a estrenar.

La mesa tendida superó cualquier expectativa: blanco mantel de hilo bordado, vajilla de porcelana y hermosas copas de cristal.

Todo ese despliegue de buen gusto sólo para agasajarlos, cosa que los conmovió y emocionó; disfrutando todos con alegría del encuentro que hizo posible que se conocieran

Luego de un indescriptible almuerzo, salieron a pasear en auto para dar una vuelta por los alrededores dirigiéndose a Frascatti, que es un pueblo cercano más grande y más antiguo, conocido por la excelente calidad de sus vinos.

Todos estos pueblos tienen una parte antigua y otra nueva. La parte antigua es muy pintoresca, con callejuelas tortuosas que bajan y suben con las construcciones características de los pueblos de Italia.

A la vuelta no los dejaron ir sin cenar, demostrándoles una vez más su maravillosa hospitalidad.

Volvieron al hotel casi al anochecer después de haber pasado un día inolvidable. Mientras tanto, ese mismo día el resto del grupo había hecho la excursión a Nápoles donde también visitaron la isla de Capri.

Al día siguiente abandonarán Roma para dirigirse a Florencia.


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