LA CIENCIA
La
ciencia es el conjunto de conocimientos que sólo admiten principios,
consecuencias y hechos, rigurosamente demostrables.
Las respuestas de la ciencia se obtienen de
la observación, la experimentación y la verificación rigurosa de los fenómenos
naturales en base a las leyes de la física que
no admiten ningún tipo de experiencia subjetiva.
Sin embargo, todo conocimiento científico
parte de una hipótesis que por lo general es una intuición, una idea que surge
a partir de la experiencia; y que sólo se convertirá en conocimiento científico
si cumple con los dictados de la ciencia.
Así y todo, ninguna ciencia jamás logrará en
ningún experimento una certeza plena, sino sólo un porcentaje mínimo de
probabilidad de efectividad exigido para que la hipótesis sea aceptada como
verdadera.
La ciencia que nos ocupa en estos momentos
de pandemia es la ciencia médica, que incluye a todos los profesionales e
investigadores que trabajan en los laboratorios de todo el mundo que están en
la permanente búsqueda de soluciones químicas para vencer todo tipo de
patología, como el cáncer, los accidentes
cerebro vasculares, las enfermedades infecciosas producidas por bacterias,
virus, y otros posibles agentes que a su vez tienen la capacidad de cambiar y
de transformarse para continuar
existiendo.
Vemos que la lucha por la vida no es sólo
nuestra, es también la de todo ser que habita este planeta, donde toda especie
nace, se reproduce y está expuesta a los peligros que lo rodean y donde sólo
sobrevive el más apto.
Todavía no se ha llegado a saber todo sobre
el Covid19, pero se acepta con algunos reparos que no es un ser vivo, que es un virus que necesita un huésped humano, o
animal, para poder reproducirse, o sea lograr ingresar a una célula y a través
del ARN (ácido desoxiribonucleico)
extenderse a todo el cuerpo.
Sin embargo, se pudieron elaborar vacunas en
los principales países del mundo en tiempo record.
La rapidez con que se lograron obtener
resultados, dado la urgencia por controlar la pandemia; pone en duda el
riguroso cumplimiento de los requisitos que exige la ciencia, como comprobar los resultados con la
participación en el experimento de una
gran número de voluntarios.
Claro que esta deficiencia en la
experimentación y la comprobación de los resultados no sólo sucede con las
vacunas, porque pasa con todos las drogas nuevas que se elaboran en los
laboratorios de todo el mundo, que
suelen ser aprobadas por las entidades que fiscalizan la producción de
medicamentes de cada país donde se expenden, aunque hayan participado en las
pruebas de efectividad una cantidad mínima de participantes.
No olvidemos que la producción de vacunas generaron
y seguirán generando incalculables ganancias a quienes las producen, ya que casi todo el mundo tuvo que vacunarse y va a
tener que seguir vacunándose seguramente año tras año durante bastante tiempo
para evitar enfermarse.
Afortunadamente, la producción de vacunas en esta oportunidad, a juzgar por la disminución de casos en todo el mundo, es efectiva para inmunizarnos contra el corona virus, que seguramente se convertirá en otra gripe más como las otras que existen; y lo más probable es que después de algunos años, el sistema inmunológico las reemplace, incluso con mayor efectividad y que termine desapareciendo como ha ocurrido con otras enfermedades, a través de la historia.
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Buen día, Malena! Jejeje hoy me pele. El barbero es un chico de 50 años que vino aquí a Canarias desde tu país, en la Patagonia.
ResponderEliminarNo sé por qué le tengo manía al chico. Será un poco de envidia. Porque a veces quiero ser barbero.
Es bueno verdad? Tener ilusiones...
Escritor va tirando hacia adelante. Iba a decir pa lante. Digo eso y solo me leen los albañiles. Y los albañiles supongo que poco leen. Después de un duro día de trabajo.
Jejeje 😂
Conclusión, escribir que te entiendan. Al final tendrás tus lectores. Los que conecten contigo.
Bueeeeeen diaaaaa!!!
😗
Pablo Manuel