La sexualidad es íntima y personal


La sexualidad ha dejado de ser un tema tabú para convertirse en un asunto trillado y para muchos en una obsesión.

Se ha hablado tanto y se ha visto tanto relacionado con el sexo que la mayoría de la gente común, cree que su sexualidad es anormal porque su conducta sexual es diferente.

Cada persona es un ser único e irrepetible y tiene una forma distinta de vivir su sexualidad, sin embargo todos están empeñados en seguir los standares que muestran las películas y se preocupan cuando creen no sentir lo mismo que parecen sentir los actores que interpretan las escenas de sexo.

Un actor tiene que reflejar fielmente lo que dice su guión, no lo que él siente, de modo que todo lo que vemos en el cine y en la televisión es pura ficción y tiene que ver muy poco con la realidad.

La sexualidad “normal” no existe, sólo existe el acto sexual que cada uno vive con la persona que ama, de una manera única.

Toda forma de expresión sexual que produce satisfacción y hace feliz a una pareja es “normal” para ellos, para otros esa expresión puede ser diferente e igualmente satisfactoria.

En cuanto a la frecuencia de las relaciones sexuales tampoco se puede generalizar, porque depende de muchos factores y de muchas circunstancias.

Una pareja bien avenida en la vida cotidiana es más probable que no tengan problemas sexuales de ninguna naturaleza, porque la sexualidad es la consecuencia natural de un vínculo armonioso.

Si al contrario, viven peleando o atormentados por los celos o las preocupaciones, difícilmente podrán disfrutar de un encuentro amoroso satisfactorio.

El acto sexual exige a los amantes estar relajados y tranquilos y que puedan disponer de tiempo y de comodidades apropiadas que favorezcan su intimidad. No pueden pretender competir con la “perfomance” que disfrutan otros porque siempre serán personas que se relacionan de una manera diferente y que en consecuencia también tendrán encuentros sexuales distintos.

La sexualidad no es un deporte que hay que practicar por obligación dos veces por semana, es una de las maneras de expresar el amor, es el encuentro más íntimo que puede existir entre dos personas.

No necesariamente la frecuencia de las relaciones sexuales está indicando la armonía que existe en una pareja, ya que no siempre ambos participan por igual de la misma.

Las mujeres suelen fingir el orgasmo y la mayoría de los hombres sufren de eyaculación precoz y eligen creer que sus parejas realmente disfrutan al mismo tiempo.

Como bien decía Woody Allen en una de sus películas “un orgasmo simultáneo” es lo más difícil del mundo, de modo que bueno es que los hombres comiencen a imaginar que es bastante probable que no siempre sus eventuales parejas lo pasan tan bien como ellos creen y que se preocupen en aprender el ritual de cortejo que necesita toda mujer para disfrutar del sexo.

Los hombres jóvenes son los candidatos firmes para el fracaso, porque no pueden controlar su eyaculación y siempre terminan demasiado pronto.

Una pareja puede mejorar sus relaciones sexuales con el tiempo, porque al disminuir la carga endógena, el hombre puede adquirir la experiencia suficiente como para controlar su cuerpo.

Malena