El Ronquido



El ronquido es un trastorno provocado por la obstrucción de las vías respiratorias durante el sueño.

Es importante solucionar este problema, no sólo por las molestias que ocasiona a quienes tienen que compartir la habitación del roncador, sino porque puede provocar serios problemas de salud.

Comer, beber, fumar en exceso y el aumento del peso corporal,  favorecen el ronquido, porque producen una mala mecánica respiratoria al dormir.

El ronquido no sólo molesta a los que tienen que soportarlos sino que puede producir micro traumatismos locales que empeoran las condiciones de los tejidos comprometidos en la respiración.

Dormir boca arriba favorece los ronquidos porque la lengua cae hacia atrás y obstruye la vía aérea; pero también existen factores fisiológicos que los provocan, como la desviación del tabique nasal, el mentón hundido, la lengua grande, el tamaño de las amígdalas, la campanilla grande o el exceso de tejido graso en la garganta.

Si el ronquido va acompañado de apnea durante el sueño, que es cuando se interrumpe la respiración durante unos diez segundos, el problema se torna más serio.

Los roncadores con apnea no pueden descansar bien cuando duermen, pueden sentirse cansados, somnolientos, irritables al día siguiente, pero también suelen manifestar síntomas peligrosos como presión alta, cardiopatía isquémica, cefaleas matutinas y hasta impotencia sexual.

Para los casos de los roncadores con apnea, la técnica quirúrgica más efectiva, menos dolorosa y de recuperación inmediata, que además ofrece la seguridad de no cometer errores,  es la que utiliza la radiofrecuencia controlada.

Otro tipo de cirugía más invasiva puede tener efectos secundarios, como por ejemplo dificultades para comer.

Un 45% de las personas adultas roncan, principalmente hombres de mediana edad, fumadores, con sobrepeso y que consumen alcohol en forma habitual, pero también sufren de este trastorno quienes presentan cierta constitución física que favorece los ronquidos.

Por lo general, el que se presenta a la consulta médica por este motivo no es el que padece este trastorno sino el que tiene que compartir su lecho; y hasta puede ser causa de divorcio.

El envejecimiento de la población y los malos hábitos de vida contribuyen a incrementar este problema del dormir.
Malena


Fuente: “Muy interesante”; número 292; “Durmiendo con el enemigo”; Pablo Seoane.