LA LIBERTAD MAL ENTENDIDA - Psicóloga Malena Lede

No somos libres DE. los compromisos contraídos, solamente somos libres PARA desarrollarnos y crecer.  O sea que no somos libres DE pero si somos libres PARA.

Cada decisión que tomamos en la vida nos compromete para siempre, luego nuestra libertad siempre estará condicionada por esas decisiones.

Queremos ser libres para tomar decisiones pero no somos capaces de responder por ellas; y volvemos a tomar otras decisiones sin tener en cuenta los compromisos de las decisiones anteriores. De esa forma la vida se convierte en un caos, y el resultado es el sufrimiento.

Ser libres significa no depender de nadie y poder resolver los problemas sin contar con ninguno, por eso no podemos agregar otro problema a un problema anterior, ni comenzar una nueva vida cuando quedaron consecuencias de una vida previa que es nuestra responsabilidad.

Una separación es una cosa seria porque destruye una familia y le quita a los hijos la oportunidad y el derecho que tienen de tener un padre y una madre unidos.

El dolor de las frustraciones amorosas se tapa con actividades, un trabajo, un estudio, otra relación con cualquiera, para evitar la soledad y para no pensar,

Se hace oídos sordos a la infelicidad de los hijos y ese desamor ocasiona conflictos que pueden provocar enfermedades, porque no olvidemos que toda enfermedad del cuerpo comienza siendo una enfermedad del alma.

Tener un hijo es fácil, hacerlo feliz es más difícil.  Se transfiere la responsabilidad de su cuidado  a otra persona que ya ha hecho lo suyo y que nunca podrá reemplazar a la madre por más eficiente y amorosa que sea.

Los niños desean tener a su propia familia y estar con los suyos y no sentirse un objeto que hay que depositar en algún lado porque molesta y parece estar de más.

Cuando se ha fracasado en una relación,  es muy alta la probabilidad de repetir historias ya que siempre nos involucramos con personas con ciertos rasgos de personalidad similares de alguna forma.

Estamos destinados a cometer siempre los mismos errores por eso hay que ser precavido y no confiar demasiado en otras eventuales relaciones; ya que ser  maduro implica hacerse cargo de los compromisos asumidos libremente y ser capaz de responder adecuadamente como adultos.

Si hay una separación, se puede tener otra relación por supuesto pero siendo discretos,  priorizando la relación con los familiares que ayudan y con los hijos..

Los hijos aprenden de sus padres de modo que seguramente harán lo mismo que ellos cuando sea mayor.  Es probable que si han sufrido experiencias de abandono no se hagan cargo de las relaciones que elijan ni de los hijos que tengan porque creerán que está bien porque eso es lo que hicieron sus padres y como resultado sólo sufrirán.

Aprendamos a ser más generosos y seamos capaces de dar buenos ejemplos si es que queremos que nuestros hijos sean más felices y que el mundo en que vivimos sea mejor.