“Gordo
con billetera mata galán”; este es un conocido "slogan" que se exhibe en una publicidad que promociona la venta de
billetes de lotería, el cual me llevó a preguntarme hasta qué punto puede ser
cierto.
Es
verdad que para un hombre de esta sociedad de consumo, no siempre el exceso de
peso es un obstáculo para encontrar a una bella mujer como pareja, si además
tiene una considerable cuenta bancaria y una generosa billetera. Pero habría que evaluar qué clase de mujer
atrae, y para qué tipo de relación se acerca a él.
Es
evidente que los obesos, calvos, bajos y no tan jóvenes, pero ricos o
prósperos, siempre tienen una mujer bella al lado, porque el dinero suele
alterar la percepción y producir en algunas mujeres ceguera selectiva.
También
es cierto que no es agradable que a uno lo quieran por su dinero, sin embargo, la identidad de una persona incluye la ropa
que lleva, el trabajo que hace, el dinero que tiene, el auto que usa, la casa
donde vive, sus relaciones, su nivel de instrucción, su educación, su simpatía,
su seguridad en sí mismo, su carácter, y también su atractivo físico.
Sofía
Loren, una de las más atractivas y famosas actrices italianas de mediados del
siglo pasado, tuvo como principal pareja, hasta que él falleció a los 94 años, a un
conocido director de cine italiano, Carlo Ponti, que por supuesto influyó notablemente
en su carrera cinematográfica pero que también pudo conquistar su corazón, a
pesar de ser mucho mayor que ella, de estar casado, cuando aún no existía el
divorcio, y de su poco agraciado aspecto
físico.
Los
tabloides de esa época publicaron en ese entonces, algunos romances que ella
mantuvo con primeras figuras del cine norteamericano, que por su gran atractivo
físico, fueron los famosos galanes de muchas películas de esa época. Sin embargo, ella se mantuvo firme y continuó
prefiriendo a su mentor.
La
naturaleza suele ser misericordiosa y dotar a las personas no favorecidas
físicamente con otras cualidades que pueden ser aún más atractivas que un bello
rostro o un cuerpo escultural lleno de músculos.
Los
hombres muy atractivos, por lo general pueden aprovechar esta ventaja para
tener muchos amoríos, aunque la mayoría no les duren mucho tiempo, porque puede
ocurrir que en otros aspectos decepcionen y sólo se trate de personas que sólo
tiene un buen cuerpo.
La
belleza física es una buena carta de presentación, pero no es suficiente, son
de la misma importancia el buen carácter, la buena educación, la actitud hacia
el trabajo, la moral, el comportamiento sexual, la capacidad de sentir afecto y
de tener relaciones estables.
También
existen parejas de lindos, como la de Brad Pitt y Angelina Jolie, dos monstruos
del espectáculo que además de belleza física parece que también tienen
sensibilidad social y sentido altruista.
Claro
que todavía son jóvenes y atractivos, veremos si el paso del tiempo, que es
implacable, puede afectarlos también a ellos y sucumbir a los encantos de alguien
más joven.
El
dinero no es ni malo ni bueno, y depende de en qué manos esté. Si sirve para vivir una buena vida, acordándose de ayudar a progresar a los demás,
puede ser una bendición, pero si lo que
se pretende es hacer más y más dinero para acumular poder, puede ser un
instrumento diabólico.
Las
encuestas dicen que las mujeres priorizan en el hombre el sentido del humor, el
respeto, la educación, la estabilidad emocional y su trabajo; la calidad de las
relaciones sexuales es también muy importante, pero contrariamente a lo que se
podría pensar, tanto el dinero como el aspecto físico ocupan en el
interés de ellas los últimos lugares.
No
quiere decir esto que las mujeres desprecien el dinero o a un hombre atractivo físicamente, al contrario, tanto el físico como el dinero son factores que pueden enriquecer los atributos personales de un hombre, pero que también pueden empobrecer su personalidad y es probable que por eso, a la hora de evaluar a un candidato, algunas mujeres no consideren tanto el atractivo físico como el dinero requisitos excluyentes.
MALENA
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