Escucha a tu cuerpo - Psicología Malena Lede



Cada parte de nuestro cuerpo nos habla y es importante escucharlo.

Nuestro cuerpo expresa todos nuestros pensamientos y cada célula le responde de la misma forma creando salud o malestares y enfermedades.

La cabeza representa nuestra identidad, ya que por la cabeza y la cara nos reconocen, de modo que refleja cómo nos sentimos con nosotros mismos. Nos duele la cabeza cuando nos exigimos demasiado, somos demasiado severos con nosotros mismos y pretendemos ser perfectos. Rebela mucha rabia reprimida.

El pelo simboliza la fuerza y cuando se cae está transmitiendo que ya no soporta las presiones, porque el folículo piloso se pone tan tenso que no lo deja crecer.

La tensión en los músculos demuestra debilidad, porque es fuerte la persona serena, relajada y confiada. Ordénele relajarse a su cuero cabelludo y luego vea los resultados.

Los oídos no oyen cuando no les gusta lo que van a escuchar y duelen cuando lo que oyen les produce molestar.

Los problemas en los ojos indican que hay cosas que no queremos ver, en nosotros mismos o en los demás; así como lo que está pasando ahora, lo que pasó antes o lo que creemos que pasará después, que no se puede enfrentar.

El cuello nos duele cuando somos inflexibles y obstinados y no aceptamos como piensan los demás; la garganta es la que nos permite expresarnos, y cuando nos duele o nos molesta es porque no nos atrevemos a defender nuestro punto de vista o a expresar nuestra creatividad.

Los problemas de la garganta y de la tiroides reflejan frustración y resistencia al cambio.

Los brazos se relaciones con las capacidades personales, las articulaciones de los brazos con las emociones del pasado y los codos con la flexibilidad para cambiar de rumbo.

Las manos muestran cómo somos. Si están crispadas y torcidas por la artritis es porque nos aferramos a las cosas y a las personas o tenemos temor a la pérdida, y si no se resisten, se mantienen flexibles y blandas.

La espalda significa nuestro apoyo y si nos duele es que nos sentimos vulnerables y solos. La parte superior tiene que ver con la falta de apoyo emocional, la parte media con la culpa por el pasado y la parte baja o lumbar indica preocupación, agotamiento y extenuación.

Los pulmones simbolizan la capacidad de dar y de recibir y las afecciones pulmonares expresan el temor a vivir o sentirse indigno de existir.

Los pechos representan la maternidad ; los problemas de pecho están mostrando excesos en el rol sobreprotector de personas o cosas; y cuando se trata de tumores señalan la existencia de un fuerte resentimiento.

El corazón es el amor y la sangre la alegría. El amor hace que la vida se viva con alegría. La falta de amor y alegría alteran el funcionamiento del corazón y la circulación.

El estómago digiere los alimentos y también los pensamientos, los problemas de estómago revelan miedo a asimilar las experiencias.

Las úlceras representan temor a ser ineficientes, a no cumplir con las expectativas de nuestros padres, a no poder satisfacer a nuestros superiores. Expresan baja autoestima e inseguridad en sí mismo. La solución para este problema es el amor, perdonarse y ser más bueno con uno mismo.

Las piernas son las que permiten seguir adelante, las dificultades con ellas indican miedo a avanzar, con las rodilla miedo a cambiar y con los pies es no entender hacia dónde van.

Los trastornos de la piel representan incapacidad para defenderse y sentimiento de vulnerabilidad frente a las amenazas del medio.

La clave para el funcionamiento normal del cuerpo es la aprobación de uno mismo, la aceptación de la realidad tal cual es y la entrega incondicional a lo que Es.

Malena