EL CIELO ES EL LIMITE - Psicología Malena Lede

   No somos nada sin un proyecto y somos libres para hacer realidad nuestros proyectos, no solamente desde el punto de vista intelectual sino también como seres humanos, empezando en nuestra propia casa con nuestras relaciones personales.

    Siempre estamos a tiempo para ser más amables, considerados, pacientes y tolerantes y para poder lograr ponernos en el lugar de los demás, y comprenderlos sin juzgarlos.

   Es un hecho que el desarrollo del intelecto puede mejorar a una persona, cambiarle el carácter, hacerla más receptiva, más comunicativa, más segura de sí misma y más abierta al cambio.

   El estudio nos modifica el carácter, el vocabulario, nuestra forma de expresarnos, nos elevan a una nueva dimensión que no sabíamos que existía, un ámbito donde se puede apreciar más la vida, la belleza, la armonía de todas las cosas.

   Todos deberían tener la oportunidad de elevarse de lo cotidiano y de alcanzar penetrar en el mundo del conocimiento, porque si hay algo que nos diferencia de las demás especies animales y de otros seres humanos es la cultura.

   La persona instruida tiene una mejor visión del mundo y de la realidad en que vive porque ha aprendido a ver la esencia de todas las cosas, más allá de las apariencias.

  No les llegan los estímulos sin el maravilloso filtro del discernimiento, puede distinguir lo necesario de lo superfluo, lo importante de lo trivial, lo esencial de lo existente, sin dejarse llevar por los sensacionalismo, la prensa amarilla, los sangrientos encabezados, la inoperancia de los políticos.

  La cultura es la llave que abre todas las puertas a todos aquellos que no han nacido en cuna de oro y que les permite disfrutar más de la vida, de los afectos y de las cosas materiales.

  El que lo tiene todo sin habérselo ganado y no ha hecho nada para cultivar su intelecto,  se ha conformado con vivir en un mundo cerrado, lleno de comodidades pero vacío por dentro.

  No hay límite para quien esté dispuesto a mejorarse y ser cada día mejor persona y la atención e intención son los mejores recursos que están al alcance de todos.

Malena Lede