BASURA PLÁSTICA EN NUESTROS INTESTINOS - Psicóloga Malena Lede



(Foto de Malena)

Los residuos de plásticos, a pesar de demorar más de mil años en degradarse, en poco tiempo se reducen a pequeñas partículas que son denominadas micro plásticos, que actualmente se encuentran presentes en los mares, en el agua corriente y también en la sal de consumo humano. 

Estas micro partículas ya hace tiempo que se han observado en los peces, pero ahora se ha comprobado que se encuentran también en el intestino de los seres humanos, a través de un estudio científico realizado en la Universidad Médica de Viena, de la materia fecal de individuos residentes en distintos países del Hemisferio Norte, que dio positivo.

Aunque aún no se sabe en qué medida esta condición pueda resultar dañina para la salud, es algo que está produciendo preocupación mundial.

Las personas más expuestas a este flagelo son las que se alimentan habitualmente de frutos del mar.

Los residuos más comunes que se detectaron en los intestinos de los que participaron en la muestra, pertenecen principalmente a componentes que se utilizan para fabricar botellas y tapas de plástico.

Aunque naturalmente los organismos desechan todos los elementos inorgánicos que no puede asimilar, no se sabe aún si estos residuos a la larga se podrían acumular en los tejidos y producir daños.

Se han localizado en los océanos verdaderas islas de residuos de plástico, que vagan a la deriva contaminando todo a su paso. Sin embargo, aunque ya existen algunas medidas gubernamentales tendientes a disminuir el uso de bolsas de plástico, el problema de las botellas no parece haber sido contemplado, teniendo en cuenta que no son sólo las botellas sino también los embalajes que se utilizan para su distribución.

Afortunadamente, muchos fabricantes están comenzando a fabricar nuevamente toda clase de envases domésticos de vidrio, los cuales están siendo preferidos por el público.

Se sabe que un cambio en la producción de productos con envases de plástico exige una gran inversión para una gran cantidad de fabricantes, pero también hay que reconocer que esa tecnología, que se utiliza desde hace muchos años, es muy probable que ya esté totalmente amortizada.

Los cambios tecnológicos que se están produciendo en el mundo no se reducen a la eliminación de los plásticos sino que abarcan la mayor parte de las áreas de producción;  y no sólo tiene un costo económico sino también humano ya que elimina una fuente de trabajo y exige la formación adecuada para adaptarse a una nueva tecnología.

Son temas muy complejos que exigen una solución a nivel mundial que tenga en cuenta tanto los aspectos económicos, como sociales, ecológicos y principalmente la salud de los seres humanos.